A 1146 metros sobre el nivel del mar y a 88 kms de Ávila se sitúa el municipio de Solana de Ávila.
Entre casas reformadas paseamos por el laberinto
de sus calles
alcanzando antigüas casonas
con curiosas balconadas.
El agua corre por sus fuentes
entre piedra y madera
y bajo la belleza de las portadas de alguno de sus edificios.
Calle arriba, calle abajo
llegamos hasta la parroquia de Solana
que tiene como titular al Apóstol San Bartolomé.
La iglesia se terminó de construir a finales del siglo XVII en la que su torre,
fachada y arcos son de sillería.
Nuestros pasos dan con la Plaza Mayor
con viviendas de hasta tres alturas que se adosan
al Ayuntamiento de nueva construcción.
La pequeña carretera cruza a lo largo del pueblo
dejando a ambos lados preciosas bocacalles
que descubren su vetusta arquitectura popular.
Cruces que nos llevan hacia las afueras para mostrarnos
la Ermita de Nuestra Señora de la Nueva situada a menos de un km. del pueblo.
El edificio ha sufrido varias modificaciones desde su construcción en el XV
quedando de esta forma en la actualidad.
El ganado pace tranquilo
entre el suave rumor de caños
y fuentes
mezclado entre lo viejo y antigüo
y lo mas moderno.
Un sol muy caniculoso
le cuesta alumbrar los hermosos rincones con expectantes protagonistas
terminando el paseo por esta pequeña localidad en tierras abulenses de Aravalle.
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