LERMA

El día 24 de marzo de 2016 nos damos un paseo por la Villa conventual y cortesana del siglo XVII, la burgalesa Lerma.
Empezamos el recorrido por el Monasterio de la Madre de Dios (1608-1610), con interesante fachada y habitado por las monjas Carmelitas descalzas

para entrar en el conjunto Histórico-Artístico de la villa de Lerma por su precioso Arco de la Cárcel flanqueado por dos cubos defensivos con saeteras. En el siglo XVII fue utilizado como cárcel y actualmente es la sede del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Arlanza.

Entramos al núcleo medieval

hasta la Parroquia de San Juan

y antigüa Plaza de la Villa,

con típicos soportales ,

 hermosas, peculiares 

y representativas calles.

Ascendemos 

entre cuidados jardines y un maravilloso universo de piedra,

alcanzando la Iglesia Colegiata de San Pedro (1613-1617)

y su bella portada.

Las vistas de la Vega del Arlanza nos conquistan y nos seducen

con verdes y brillantes campos a los pies de los montes nevados.

En la parte baja descubrimos un viejo molino totalmente remodelado.

Entre arquerías

y escaleras 

tomamos el Mirador de los Arcos en la Plaza de Santa Clara,

donde podemos ver también el Monasterio de la Ascensión de Nuestro Señor (1604-1610), primera Fundación Conventual de Lerma

y está habitado por monjas del Instituto Religioso Iesu Communio.

Seguidamente pasamos por el Monasterio de Santa Teresa de 1617, que fue ocupado por Frailes Carmelitas.

A continuación el Ayuntamiento

y una fuente

que nos lleva hasta la Plaza Mayor, en origen porticada con casas de nobles cercanos al Duque de Lerma.

En ella se alza imperioso el Palacio Ducal (1601-1617), realizado según las trazas de Francisco de Mora

en estilo Herreriano, concebido como residencia ducal y aposentos para la corte en el siglo XVII.

En la actualidad es Parador Nacional de Turismo.

Abandonamos el lugar donde antigüamente  se realizaban celebraciones de solemnes fiestas cortesanas

dejando el Palacio Ducal 

y entrando en el Convento de San Blas (1613-1617),

habitado por monjas Dominicas.

Nos acercamos hasta la Plaza del Mercado Viejo

y bajar hasta el Monasterio de Santo Domingo (1613-1617) con su fachada clásica y aires barrocos.

Bajamos toda la Calle Mayor

saliendo del casco urbano para visitar las bodegas

y admirar el precioso perfil de la villa de Lerma.

La fresca corriente nos guía hasta 

la Ermita del Humilladero, la única que aun se conserva de las siete creadas por el Duque de Lerma.

Terminamos este hermoso paseo en el puente,

uno de los vestigios medievales que se conservan en la villa

donde el Arlanza

traza el rumbo definitivo en busca del Pisuerga en el municipio palentino de Torquemada.