TRUJILLO

Trujillo se sitúa entre las vegas de los ríos Tajo y Guadiana en la provincia de Cáceres, albergando un conjunto de iglesias, castillo y casas solariegas que le declaran Bien de Interés Cultural.
El paseo comienza en el Palacio de los Barrantes- Cervantes del siglo XVII

alcanzando la Plaza Mayor y el Palacio de los Orellana Toledo (Marqueses de PiedrasAlbas), con preciosas galerías de arcaturas rematada por una crestería gótica y soluciones renacentistas.

La Iglesia de San Martín de Tours de la primera mitad del XVI con portada de tipo sagredano y con preciosa Torre del reloj

Delante de su portada admiramos el Monumento Ecuestre a uno de sus vecinos mas ilustres, el conquistador Francisco Pizarro.

Diferentes estatuas pululan alrededor de la plaza

destacando siempre la portentosa efigie de Pizarro sobre su montura.

Bellos soportales que en su día daban protección a los comerciantes que cada jueves vendían en la plaza sus mercadurías

Avanzamos entre grandes fachadas de piedra y numerosos escudos

llegando hasta las Casas principales de los Chaves-Orellana y Chaves-Cárdenas con dos magníficas columnas entorchadas.

La Casas del Concejo (Ayuntamiento Viejo), de finales del siglo XV

y el espectacular Palacio de los Marqueses de la Conquista, conocido popularmente como "Palacio del Escudo", uno de los mas importantes de la arquitectura trujillana del XVI.

Por último el Palacio Carvajal-Vargas (Duques de San Carlos)

cierra el infinito monumento dentro de esta preciosa Plaza Mayor trujillana.

Subimos por sus calles hasta la Casa de las Cadenas donde se encuentra la Torre del Alfiler, una torre gótica edificada en el siglo XIV.

Sus callejuelas nos trasladan

por un laberinto de piedra 

que nos dan acceso a las inmediaciones del Castillo

situado en lo mas alto del municipio

en el cerro conocido como "Cabezo de Zorro". Todo el castillo lo podeís ver en: CASTILLO DE TRUJILLO 

Nosotros seguimos oteando desde las alturas las preciosas estampas que desde esta atalaya obtenemos

sobre el casco histórico de Trujillo.

Desde estas alturas alcanzamos la preciosa dehesa cacereña, los conventos de San Pedro y Santa Clara, así como el Parador de Turismo.

La Torre del Alfiler enmarcada en la Plaza Mayor y la Iglesia-Convento de San Francisco

y la Iglesia de Santa María la Mayor.

Bajamos hasta la hermosa Iglesia de Santiago del siglo XII

tras haber cruzado un altivo torreón

y nos colamos en el recinto amurallado

por bonitas y preciosas callejuelas,

pasando por el Convento de las Jerónimas

y el Palacio del Marqués de Lorenzana

y alcanzando la Casa Museo Pizarro.

Las bellas torres de Santa María la Mayor

nos conducen hasta el Monasterio de San Francisco el Real de la Coria.

Cruzamos el busto y la Casa de Francisco de Orellana, junto a la Casa de los Chaves-Calderón

para rodear y llegar hasta la Iglesia de Santa María la Mayor

levantada sobre un antigüo templo románico en el año 1270.

Tras la visita de pequeñas y hermosas calles

nos posicionamos en la Puerta de Santiago

saliendo del recinto amurallado

y pasando bajo el Alcázar de Luis Chaves "El Viejo".

Bajamos por la Cuesta de la Sangre,

a través de las Casas de los Chaves-Sotomayor para volver a la Plaza Mayor.

Después de comer regresamos a la rutina de paseo,

comenzando por el Palacio Juan Orellana Pizarro, con gran soleador sobre el arco de entrada.

Por el recinto almenado

y la gran abundancia de chumberas

tomamos la Puerta de San Andrés

bajo su arco

hasta alcanzar el Convento de Franciscanos Observantes.

Muy cerca de allí rodeamos la Alberca de época romana

que nos llevará hasta la preciosa Casa-Fuerte de los Bejaranos del XIII con una arquitectura defensiva y residencial de la alcazaba trujillana.

Al lado y hacia poniente, la Puerta del Triunfo o de Fernán Ruiz,

por donde entraron las tropas cristianas en la Reconquista a los árabes.

Las murallas realizadas con muros de mampostería

y sillares de la época romana, conservan un total de 17 torres rectangulares

y cuadradas y otras almenadas.

En la Puerta de la Vera Cruz alargamos la vista sobre los campos trujillanos.

Seguimos por la parte exterior de las murallas

hasta la puerta de Coria,

pasando por la Casa-Fuerte de los Altamirano.

Fachadas de colores

se funden en pétreas callejuelas

conduciéndonos por varios museos y casas de nobleza.

Salimos del recinto amurallado bajando por la Cuesta de San Andrés

hacia el Convento de Dominicos de la Encarnación.

Terminamos el hermoso e histórico paseo por el municipio de Trujillo visitando la Iglesia y Hospital de la Caridad

y el Palacio Pizarro-Aragón, al lado del Palacio Municipal de Alhóndiga.