Comenzamos nuestros pasos por el municipio portugués de Bragança junto a las aguas del río Fervença que recorre la Sierra de Nogueira y donde se sitúa esta bella ciudad del norte de Portugal.
En la Plaça da Sé
podemos ver la Catedral de Bragança del siglo XVI fundada por el Duque Don Teodosio
y un bello crucero labrado en piedra con infinitas filigranas y elementos geométricos y vegetales.
En la Plaza del ilustre poeta portugués Luis Camoes
permanece el edificio de la Biblioteca Municipal
y una moderna e híbrida escultura de acero.
Cruzamos la Rua Dos Gatos
y alcanzar la calle Combatentes da Grande Guerra
que nos depositan en la Plaça do Principal donde encontramos un edificio militar destinado a la Guardia Principal y un pequeño monolito homenajeando a los muertos portugueses en Francia.
Además disfrutamos de la Iglesia de San Vicente y la fuente intercalada entre una pequeña capilla y la portada principal de la iglesia.
Subimos hasta los alrededores
de la ciudadela
recorriendo su bello perímetro
entre las viejas murallas
y llegar a su Puerta del Sol en la zona este.
El paseo continua por su fachada norte
para acceder al recinto por la Porta da Vila, con arco de medio punto y flanqueada por dos robustos torreones almenados.
Dentro del recinto vamos descubriendo preciosos rincones
y hermosas calles que nos conducen hasta
el Pelourinho, del siglo XIII, declarado Monumento Nacional de Portugal y que simboliza el poder municipal,conocido popularmente como "a porca da vila".
El Castillo de Bragança fue mandado construir por el rey Dinis en el siglo XIII
y esta rodeado por un precioso recinto amurallado
en el que destaca su imponente Torre del Homenaje
de planta cuadrada y 34 metros de altura albergando un precioso Museo Militar.
La Torre de la Princesa en su lado norte se rodea de múltiples leyendas de amores y desamores.
Al lado encontramos la Iglesia de Santa María cuya torre blanca, sencilla y humilde destaca
de la hermosura de su interior.
Una construcción de plano irregular y achaparrada sorprende por su originalidad como monumento único del románico peninsular. Se trata del Domus Municipalis con una cisterna y una sala superior para reuniones del concejo local.
Fue el Ayuntamiento mas antigüo de Portugal y la sala se caracteriza por la sucesión de pequeñas ventanas y una bancada corrida de piedra.
Seguimos recorriendo la ciudadela por una bella pradera
entre sus pequeñas y estrechas callejuelas
mientras nos montamos en sus murallas
y seguir descubriendo pasajes y mazmorras.
Abandonamos el recinto medieval
saliendo al exterior y dar con la Iglesia Convento de Sao Bento, fundado en 1590.
Al lado el Convento Iglesia de San Francisco
del siglo XIII en estilo románico y decoración barroca
con interior sencillo de bella factura.
De nuevo hacia el interior de Bragança, recorremos diferentes edificios
hasta alcanzar Casa do Arco-Solar dos Pimenteis,
la Iglesia de Santa Clara
y alguna iglesia mas.
Edificios civiles, institutos
y el moderno Teatro Municipal de Bragança.
Terminamos el recorrido por el luminoso cauce del río Fervença
junto a la Casa da Seda,
donde podemos ver antigüos molinos
y bellos puentes
en los que el espectáculo del río
ameniza el precioso paseo por la bella ciudad portuguesa de Bragança.
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