Remontamos el maravilloso curso del río Dueñas para llegar hasta la bonita localidad
de Lois, un pueblo muy bonito situado en el municipio leonés de Crémenes en plena montaña de Riaño.
El edificio mas importante de Lois es su Iglesia Parroquial, construida con marmol rosa y conocida como la "Catedral de la Montaña".
Descubrimos por sus calles la "Casa del Humo", una vivienda que carece de chimenea o salida de humo, de manera que éste se filtra a través de su peculiar cubierta vegetal denominada "cuelmo" formando una capa de sarro negra y brillante que cubre el interior.
A su lado una fresca fuente con dos caños
y siguiendo un poco mas adelante la Casona de los Álvarez Acevedo.
Rodeados de hermosas montañas, las casas de Lois forman un hermoso laberinto
que nos acercan hasta el remodelado recinto de las Escuelas Municipales
por una atmósfera que respira piedra
por todas las partes
con estrechas calles perfectamente saneadas
para darnos toda la información y denominación de cada una de ellas.
Viejos "colgadizos"
se asoman a las rumorosas aguas del Dueñas y sus sonidos se escuchan
en la cercana área recreativa con varias mesas y fuente, para poder disfrutar de una buena comida campestre delante de un escenario asombroso.
Montaña, piedra y una agreste vegetación
nos guían por las demás calles del municipio
descubriendo rincones de ensueño
que nos introducen en esta hermosa belleza que desprende Lois.
Este profundo valle de la montaña leonesa del Alto Esla, nos seduce con enormes casas solariegas
de gran porte,
pero la joya del pueblo es su "Catedral de la Montaña" con su aire herreriano de gran sencillez y austeridad.
Sin grandes detalles exagerados
sus campanarios se elevan hacia el cielo
mientras a ras de suelo destaca por su robustez
con una vigorosa y corpulenta estampa.
Por último, nos asaltan los poderosos escudos en la fachada
de la Casona de los Reyero,
quedando constancia de los numerosos habitantes de Lois que han pertenecido a la nobleza.
Decimos "adiós" a este maravilloso rincón rodeado de cumbres calizas
y maravillosos tonos de sus pequeños y verdes pastizales.
No quería olvidarme de comentar que tanto la iglesia como el pueblo de Lois, están declarados Bienes de Interés Cultural por la Junta de Castilla y León en los años 1992 y 1994.
Lois, que bien merece una visita.
ResponderEliminarDesde el camino que nos lleva a él siguiendo el curiosamente hitado curso del río Dueñas, hasta sus emblemáticas casonas solariegas, la fuente con dos caños, la fábrica de luz, la casa del humo y tantos otros rincones además y sobre todo... esa 'Catedral de la Montaña' por la que hoy día es afamado.
Completa y muy bien ambientada esta crónica de este bello pueblo en el corazón de la montaña de Riaño.
Un saludo de 'Ojolince y Sra.'