El Castillo de los Templarios de Ponferrada, con una superficie de 8000 metros cuadrados, es el conjunto fortificado mas imponente del norte peninsular y uno de los enclaves templarios mas importantes de Europa.
Los orígenes del castillo se remontan al siglo XII, donde inicialmente fue un poblado asentado sobre un castro celta, para ser confiscado a la Orden del Temple.
La presencia de los Señores de Lemos es visible en la cara sur del cubo Nuevo sobre la ventana enrejada.
Su privilegiada situación en el corazón de la ciudad de Ponferrada hace que disfrutemos se sus magníficos muros
y torreones.
Bajando hacia su entrada podemos admirar el redondeado Torreón del Malvecino y mas abajo en el extremo sur, el enorme torreón de planta rectangular de la Torre de Cabrera.
La portada principal comunicada con un puente
toda ella de mampostería,
esta compuesta por dos torreones que cobijan un arco de entrada de medio punto
desde donde podemos ver el muro sur del castillo.
La Torre del Homenaje
nos da paso a un recinto defensivo que distribuye el paso hacia las Torres Cabrera y Moclín.
Por sus parámetros nos podemos asomar a varias ventanas hacia el exterior,
algunas de notable belleza.
Ya en el Patio de Armas nos dirigimos a la Torre Moclín
donde podemos observar una exposición de diferentes trajes de la época,
así como la indumentaria de los Caballeros Templarios.
Desde esta posición alcanzamos la mayor parte del Patio de Armas con el Castillo Viejo, Dependencias Palaciegas y la torre de la Iglesia parroquial de Ponferrada al fondo.
Nos subimos a su adarve
para llegar a su Torre de los Caracoles
y sobrevolar su entrada principal
sobre el flanco sur del castillo.
Seguimos el itinerario de sus almenas dejando atrás la Torre Cabrera entrando en su fachada este
y donde a mitad de recorrido encontramos
la Biblioteca Templaria mostrando la grandeza de los libros mas bellos de la Historia.
Llegando a la Torre del Malvecino, desde donde vemos la muralla y el Castillo Viejo,
bajamos
para visitar las Dependencias Palaciegas
encontrando un amplio claustro modernizado,
antigüas escrituras en piedra
y el gran mural que decora el Centro de Investigación.
Después de visitarlo, salimos al exterior y recorriendo su muralla este
nos acercamos al Castillo Viejo
Desde la muralla sus portentosos muros
nos guían hasta su entrada
con una puerta gótica rematada de matacanes.
Cruzamos su entrada
para admirar la Torre del Homenaje de 24 metros de altura
y sus muros interiores
del siglo XIV,
encontrando también un profundo pozo.
Salimos del recinto
hacia el Patio de Armas para pasear por la Ronda del Sil, entre el Castillo Viejo y la Torre de Moclín, siendo la que tenía menor necesidad de defensa dada su altura sobre el río.
Solo nos queda ver las ruinas de antigüas edificaciones en su interior
para salir al exterior y contemplar
su fachada sur en su totalidad,
la sobria Torre de Moclín,
y su corredor oeste sobre las aguas del Sil.
"El ejército desplazado por los Reyes Católicos para la reconquista del Bierzo y toma de la fortaleza de Ponferrada, supuso un notable despliegue. El grueso de las tropas estuvo formado por 2900 peones, 650 lanzas de caballería, 100 espingarderos de las tropas de élite y numerosos soldados de fortuna"
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