Aldea del Obispo es un municipio salmantino en la Comarca de Argañán junto a la línea fronteriza con Portugal. Podemos ver su iglesia parroquial,
el Ayuntamiento
y un hermoso pilón-abrevadero a la entrada del pueblo.
Pero la joya de estas tierras se sitúa a las afueras, sobre un altozano donde encontramos el
Real Fuerte de la Concepción, hoy en proceso de rehabilitación para convertirlo en un hotel de cuatro estrellas.
El Fuerte de la Concepción es un castillo abaluartado que defendía "las plazas" durante el siglo XVII.
Desde el puente podemos ver
el foso que ródea todo el conjunto.
En el interior disfrutamos de un hermoso
patio de armas de 50 metros de lado en planta cuadrada
y cada esquina esta formada por un baluarte pentagonal denominados del Rey y la Reina los que miran a Portugal y del Príncipe y del Infante los que miran a Aldea del Obispo.
Salimos y descubrimos
sobre la fachada principal un magnífico escudo.
Desde el foso y por medio de una caponera accedemos a las
Caballerizas, donde se levantó
el Cuartel de Caballería con dos partes semicirculares
con alojamiento para 90 caballerías y sus jinetes.
Compuesto de dos pisos, el inferior con pesebres de piedra para los caballos y el superior, dormitorios para los hombres.
En la parte mas alta del cerro aparecen las ruinas del Fortín de San José.
Una construcción con características generales de fortaleza y que servía de almacén.
Es el edificio en el que podemos ver
la situación mas ruinosa
de todo el conjunto.
Un paseo por el camino cubierto
que enlaza Fortín, Caballerizas y Castillo
nos deja enormes imágenes del pasado glorioso
de esta potente construcción.
Situado en la cima de una pequeña colina entre el pueblo español de Aldea del Obispo y el portugués Vale da Mula, el Fuerte de la Concepción nos asombra por su belleza, simetría y diseño, constituyendo una de las fortificaciones mas perfectamente concebidas y construidas de toda la península.
Con la mirada en Aldea del Obispo
nos alejamos de estas hermosas tierras de Argañán.
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